Artrosis de Rodilla

La gonartrosis es una afección articular crónica, degenerativa, progresiva, localizada en la rodilla, que resulta de eventos mecánicos y biológicos que desestabilizan el acoplamiento normal de la articulación.


Así, la gonartritis o gonartrosis es la más común y la más frecuente de las osteoartritis u osteoartrosis; afecta a pacientes de más de 40 años de edad, a ambos sexos, pero con mayor predominio a las mujeres. Por lo regular, su inicio es unilateral, con tendencia a hacerse bilateral con el paso del tiempo. La incidencia aumenta con la edad; por su condición de proceso degenerativo puede involucrar a cada uno de los tres compartimientos de la rodilla y puede afectar sólo a un compartimiento aislado, ya sea medial o lateral, los dos compartimientos o los tres.

 

La rodilla está dividida por un compartimiento medial o interno (platillo tibial y cóndilo femoral), compartimiento lateral o externo (platillo tibial y cóndilo femoral) y la articulación patelofemoral. La gonartrosis puede manifestarse en pacientes con subluxación de la rótula, condromalacia o asociada a una osteoartritis femorotibial; en forma secundaria puede afectar a personas con historia de traumas repetitivos, incluyendo fracturas, ruptura de meniscos, meniscectomías.



En la rodilla existen dos tipos de cartílago articular: el cartílago hialino y el fibrocartílago. Los meniscos son el ejemplo típico de fibrocartílago; el cartílago hialino es la forma predominante de cartílago articular que cubre los extremos de las superficies articulares y cuya función es absorber la fuerza y el impacto, suministrando un bajo coeficiente de fricción y mejorando la estabilidad. Cuando hay aumento de la presión de contacto aplicada sobre la rodilla, los cambios afectan al cartílago y ocasionan fragmentación de la red de las fibras colágenas.
La prevalencia aumenta con la edad y existe laxitud ligamentosa y debilidad de los músculos que rodean y estabilizan la rodilla. Otros factores de riesgo son: pacientes del sexo femenino, predisposición genética, obesidad y relación con el trauma repetitivo o agudo. La osteoartritis es la más frecuente de las enfermedades articulares y la padece casi 90% de la población alrededor de los 40 o 50 años de edad; la rodilla, por ser una articulación que carga peso, es la más afectada.